En una nación como la nuestra, tercer-mundista aún, existen varios tipos de electores que en momentos como estos nos ponemos a prueba para ver si seguimos con la misma manera de pensar o es que ya se migró a otra clase de electorado.
Esta es una clasificación superficial, no basada en ningún estudio, sino en lo que pude ver y sacar ciertas conclusiones de las dos últimas elecciones en el Perú.
El elector confundido:
Es aquel que en todo momento para desubicado, no tiene rumbo, no sabe de donde viene ni a donde va, anda más preocupado en asuntos personales antes que en definir su voto. Esta especie en ocasiones migra hacia aquellos que siguen a la mayoría.
El elector que sigue a la mayoría:
Estos electores son un día de un pensamiento súper conservador o ultra liberal, y al día siguiente es un extremo-izquierdista; es aquel que se deja convencer fácilmente por lo que se dice en la calle, en el circulo de amigos, es decir, hace lo que la mayoría hace aún cuando discrepe con ella, prefiere callar para no ser blanco de burlas por sus ideales.
El elector que siempre votará por su partido:
Este tipo de electores ya son pocos y que los políticos buscan como oro porque son leales aún cuando el patido les da la espalda. Son una especie en extinción.
El elector principista:
Este elector diferencia a los partidos de izquierda con todos sus políticos y los partidos de derecha con todos sus integrantes, no es fiel a un personaje, sólo defiende sus principios y lo apoya, no le importa el candidato, sólo le preocupa que su modelo se practique. Aquí mis respectos los izquierdistas porque nunca se les verá apoyando a un candidato de centro ni de derecha porque harán prevalecer sus principios, pero del otro lado (centro-derechistas) sí son capaces de apoyar hasta a la extrema izquierda.
El elector que "champea"
Es el que a la hora de definir su voto juega el "Tin Marín de don Pingüé" y piensa que esto es broma y que cualquier que gane le dará igual, en mi opinión, lo sacaron del vientre antes de madurar.
El elector que vende su voto:
Este le saca el máximo provecho a su voto, le pone un precio, y los políticos muy astutamente lo llenan de regalos para que así se sienta comprometido a elegir por ellos. Estos electores más tarde ascienden a otro nivel, se hacen astutos y le sacan provecho a todos y al final votan por el que dio más. Es muy común verlos en zonas pobres y rurales.
El elector que se equivoca:
Es aquel que está bien convencido por un partido pero que ese día por alguna extraña razón (nervios, confución, mala información) se equivocó y ese día marcó mal. Peor aún cuando ese partido gana gracias a su voto.
¿Y tú en qué grupo estás? Si faltó alguno en el que no encajas, lo completas.
Lecciones bíblicas para despedir empleados
-
Despedir a un empleado es una de las tareas más difíciles para un líder,
pero se puede hacer de manera digna y respetuosa. Con principios bíblicos,
se pued...
0 alegatos:
Publicar un comentario